RELIGION LATINOAMERICA

A la mañana siguiente al levantarnos de dormir fuimos a desayunar y encontramos Nazaret llena de miles de personas habría al menos 3000 personas todas deseosas de verme. Desayunamos y fuimos a ver a la gente. La gente estaba entusiasmada conmigo, con Agripina y con Claudio. La gente sentía la presencia de Dios penetrando en sus corazones. Había enfermos y me decían: ¿puedes curarles?. les dije que si, que Dios así lo quería. POr  eso estaba aquí en este lugar mágico. Había de todos los lugares de Siria, Fenicia, Antioquía y de más lejos. el rumor era cierto había un Dios único para todos los seres humanos y no exclusivo de un pueblo. estuve curando a personas ciegas, minusválidas, gente que necesitaba un motivo para vivir por todo el sufrimiento. Me preguntaban si podían seguirme, yo les decía que fueran a Damasco y Jericó donde los sufíes seguidores de Samuel instruían en el recto camino hacia Dios. Seguid las enseñanzas de los sufíes ellos son mis discipulos aquí. Oid a Samuel el habla por mi en estas tierras. Convertid vuestra fe en el sendero de la evangelización y el bautismo. Dios es misericordioso. Él saciará las penas del corazón y os dará sabiduría, pero debeis tener la sabiduría, tenacidad y paciencia de los sufíes. Ellos serán vuestros maestros cuando yo esté en Roma. Soy el hijo de Dios, del Dios de todos los que sufren, de aquellos que son estoicos, de aquellos que buscan la luz de la sabiduria. Abrid vuestros corazones al amor de Dios, yo solo soy el instrumento para que vuestra fe en Él sea plena. Celebrad la eucarestía con el pan y el vino que son los néctares de la vida. El vino es la alegría de vivir, el nectar de los dioses y el pan es la luz de Dios que sacia vuestra hambre de conocimiento, sabiduria y ciencia. 

      Pasé la mañana con la gente. Había momentos que bautizaba en la fuente mientras curaba a ciegos de corazón. Dios obró a través mío cientos de milagros. Había una mujer llamada Eliazat que me abrazó y yo le vi el corazón oscuro. Entonces Dios iluminó su corazón y le dio poder para sanar. Venía de Antioquía porque tenía una hermana enferma y quería poder sanarla al menos del alma con la energía divina del hijo de Dios. le dije ve a tu casa y sana en mi nombre Dios estará contigo. La mujer se fue con los ojos llorosos de alegría por haber podido tocar al hijo de Dios. Viví miles de historias. Paramos a comer y los mercaderes repartieron alimentos entre los 3000 presentes. Había caravanas de mercaderes que conocían a Miriam de Damasco , la madre de Dios y habían venido a festejar la llegada del hijo de dios. estuvimos con unos mercaderes que conocían a mi familia. Pasamos la sobremesa riendo, hablando de la alegria de vivir que Dios nos daba a todos, aunque a veces el sufrimiento colpeaba las caravanas con bandidos y forajidos. En esos momentos Dios nos enseñaba otros aspectos de la vida. El sufrimiento es fuente de sabiduría les decía, a veces estamos ciegos y necesitamos un golpe que nos despierte de sueños amargos y de pesadillas. Les enseñé a comunicarse con Dios con la eucarestía del pan y el vino: dos fundamentos de toda presencia de Dios entre la gente: la alegría de vivir y estar saciados del hambre de querer saber más acerca de Dios. Les dije que iba a ir a Egipto a vivir la tentación del caos de set y que luego iría a Babilonia a por sabiduría y conocimientos antiguos quería saber si algún mercader hacía la ruta Damasco-babilonia. Un mercader llamado Simeón me dijo que el hacia esa ruta que podrían ir juntos a ese encuentro de conocimiento, después que llegaras de Egipto. Le dije que estaría un mes en Egipto para ver mi familia de Alejandria y que iría al oasis de Siwa a vivir la tentación del caos de set. Podemos quedar para dentro de dos meses y así mi familia se marcha a Roma y yo voy solo con la caravana a Babilonia. Quedamos para dentro de dos meses para hacer el viaje más iniciático que había vivido jamás. ¿Que misterios se abrirían ante mi, el hijo de Dios'?

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