RELIGION LATINOAMERICA

Pedí ayuda a la legión destinada en Alejandría y me facilitaron una cohorte. Seti había conseguido que un mercader nos prestase 3 camellos para el transporte nuestro y de las cosas necesarias para vivir 15 días en Siwa. Por la mañana me despedí de Agripina y de mi hijo Claudio. Quedamos con el centurión de la cohorte a las puertas de la ciudad,  cerca del puerto. El centurión me preguntó a que iba a un sitio tan remoto donde solo hay un oráculo de amón en desprestigio. Le confesé que era por Roma. Un lider judío había vivido la tentación del diablo en el desierto de judá y ese lider podría movilizar a fanáticos judíos contra Roma. Yo tenía que vivir la misma tentación para que mi prestigio religioso se impusiese al lider religioso judío. Por el bien de Roma debo superar la tentación del caos de Set. El centurión dijo: ¡triunfa¡ he estado en judea y sé como son los judíos. Espero que tu futuro y el de Roma salgan fortalecidos. El centurión era una persona culta conocía los clásicos romanos y griegos y había estudiado retórica. Quería dedicarse a la abogacía después del servicio militar. Le dije que Yo prediqué entre los gentiles en Palestina. La gente me acogía en sus casas con gran ilusión. Para ellos era algo transcendente que un gentil fuera el hijo de Dios acostumbrados a la exclusividad de Dios para los judíos. Viví experiencias milagrosas. Recuerdo una chica cananea que estaba desesperada por su madre. Me alojó en su casa y puse la mano sobre ella y la madre y percibí a Dios sanándolas. Yo era un buen orador por haber estudiado retórica aquí en Alejandría, pero ese milagro superó todo lo que había vivido antes. El centurión me preguntó: ¿De que Dios hablas? ¡del de toda la humanidad¡. Quiero pedirte un favor un compañero mío tiene problemas de salud. Me gustaria que lo vieras en nuestro retorno a Alejandría. Por mi sí, pero depende de él, si cree en el Dios de toda la humanidad. Seguimos el camino el guía que había conseguido Seti nos guiaba hacia el oasis de Siwa con celeridad. Decía que en 2 dias estaríamos allí suerte que conseguimos dos caballos más y los camellos llevaban provisiones para todos. EL centurión me habló de su vida y su familia. Entablamos una buena amistad. Los dos sentíamos lo mismo por los judíos respeto y miedo de su fanatismo. Si se subleva judea seguro que nos enviarán a sofocar la revuelta. Por el bien de ROma que la paz reine en JUdea. Paramos a descansar donde el guía nos dijo quedaba todavía un día de camino hasta el oasis del oráculo. Por la noche después de cenar el centurión, Seti y yo hablamos sobre Set. Seti decía que en tiempos antiguos Set era la mano de Ra, pero vino el tiempo de Osiris y Set penetró en el caos y se envolvió de oscuridad. Fue acusado injustamente de matar a Osiris y fuimos perseguidos todos los seguidores de Set. Fueron tiempos difíciles para nosotros, pero el caos fue una bendición en medio de una maldición constante. Nuestros seguidores empezaron a descubrir un camino oscuro que antes nos estaba vedado por Ra. Al fin y al cabo La muerte de Osiris a mano de Set fue una maldición disfrazada de bendición porque encontramos respuestas a enigmas de la vida que antes desconocíamos y que la oscuridad del caos nos revelaba. Debeis entender que el caos es muy poderoso. No quiero hablar todavía de la invocación y de la tentación a la que Set te hará sufrir, pero seguro que te cambia. A mi me cambió por eso sigo a Set. Necesito saber más de esa fuerza oscura que genera el caos. Me ayuda y puede hacerme inmortal como los antiguos faraones. El centurión preguntó: ¿Es peligroso? Sí, lo que quiere Jesucristo es una tentación, no quiere poder, eso puede aparecer a Set en medio de todo la fuerza del caos. Generalmente la gente quiere cosas mundanas y la oscuridad puede dártelo, pero no tiene nada que ver con lo que quiere Jesucristo.

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